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¿Cómo se construye un invernadero de jardín?

Algunos cultivos requieren ser sembrados en un invernadero, sobre todo si el huerto está en una zona fría o vas a cultivar durante el invierno. En este artículo, te damos información sobre qué necesitas para construir tu propio invernadero casero de jardín y te explicamos qué pasos debes seguir. Además, te facilitamos consejos que te serán de gran utilidad, tanto para su construcción como para su mantenimiento.




Herramientas y materiales necesarios para la construcción de un invernadero de jardín

Estructura del invernadero de jardín

La estructura del invernadero debe ser de un material resistente, como los tubos o las barras de acero galvanizado. Este acero es ideal para este tipo de estructuras, ya que está recubierto por una capa de zinc que lo protege de la corrosión atmosférica. Otras opciones son los listones de madera o los tubos de PVC. No obstante, son materiales menos resistentes. Para unir cada pieza, hacen falta conectores en el caso de los tubos o tornillos para la madera.

Si quieres construir el invernadero de forma manual, deberás hacer un boceto previo para calcular y reflejar a la perfección el tamaño de cada pieza que vaya a formar esa estructura del invernadero. De esta forma sabrás con exactitud qué materiales tienes que comprar, cómo tienes que cortar las piezas y cómo las montarás. Ten en mente que los invernaderos de gran tamaño o aquellos cuya estructura sea de madera pueden requerir de unos mayores conocimientos y experiencia.

Recuerda que es importante que las plantas cuenten con ventilación y, por supuesto, que el invernadero tenga al menos una puerta de acceso. Estos son aspectos que deberás tener en mente en el diseño de la estructura y la selección del tipo de cubierta.

Cubierta

Otra parte esencial del invernadero es la cubierta. Para ello se utiliza una lona de plástico, que deje pasar la luz solar, pero que sea resistente a la lluvia, el viento y otros fenómenos meteorológicos. Además, tiene que mantener la temperatura del interior del invernadero para que las plantas tengan el calor suficiente para crecer. Una buena opción de material para la cubierta es el plástico de 200 micras. Si quieres más información al respecto, puedes pasarte por nuestro artículo sobre cómo elegir la lona para tu invernadero.

Otro tipo de invernadero de jardín es aquel que está formado por ventanas de vidrio. Asimismo, está la opción de emplear placas de policarbonato. Ten en cuenta que, para estas dos alternativas, la estructura del invernadero tendría que ser distinta. Los invernaderos de jardín con cubierta de vidrio o de placas de policarbonato suelen ser más utilizados para un jardín en el propio hogar, mientras que los invernaderos con cubierta de lona de plástico acostumbran a ser más polivalentes y a utilizarse para cultivar un huerto.

En vez de comprar por separado todos los materiales necesarios para construir un invernadero de jardín, es recomendable optar por un kit que ya incluya todo el material necesario, como es el caso de nuestros invernaderos. Así no tendrás que preocuparte de diseñar la estructura y calcular el número y las dimensiones de las piezas, y contarás con la seguridad de que el invernadero será estable.

Herramientas básicas para el montaje del invernadero

Para construir y montar tu invernadero de jardín necesitarás diferentes herramientas. Entre las herramientas con las que deberías contar para montar las distintas partes del invernadero se encuentran las siguientes:

  • Cinta métrica
  • Destornillador
  • Llaves inglesas
  • Nivel de burbuja
  • Tijeras
  • Cúter
  • Escalera de tijera

Si vas a encargarte de crear y construir el invernadero desde cero, necesitarás usar, además de las anteriores, otras herramientas, como, por ejemplo, una cizalla o un taladro.

Construcción del invernadero paso a paso

1. Organizar los materiales y preparar el terreno

Antes de comenzar con la construcción en sí, es importante una buena preparación previa. De esta forma, no sufriremos ningún contratiempo durante la instalación. Para que no se te pase nada, haz una lista con todo lo necesario, deja todo el material y las herramientas ordenados y al alcance, despeja el espacio donde vas a construir el invernadero y comienza su montaje con el tiempo suficiente.

Del mismo modo, elige la orientación y la ubicación exacta del invernadero, evitando instalarlo en lugares que dé la sombra durante todo el día, ya que la luz solar es esencial para los cultivos del huerto, o donde haya peligro de roturas, como, por ejemplo, debajo de árboles. Prepara el terreno, de manera que quede totalmente liso y nivelado. De lo contrario, el agua se podría acumular y ahogar algunas de tus plantas.

2. Instalar el invernadero

Una vez tengas todo listo para comenzar, hay que empezar montando la estructura. Comienza con la base y, para las zonas más altas en las que se requiera el uso de escalera, cuenta siempre con la ayuda de al menos otra persona.

Cuando la estructura ya está totalmente montada, es momento de poner encima la cubierta del invernadero de jardín. Es importante fijar bien la cubierta a la estructura para que esta no se vuele ni se mueva. Por eso, una vez unidas ambas partes, hay que anclar el invernadero al suelo (dependiendo del tipo de invernadero, es posible que antes de empezar a instalar la estructura haya que excavar las zanjas de anclaje).

Si has adquirido un kit de invernadero de jardín, sigue las instrucciones para instalar ese modelo en específico, ya que los pasos de montaje pueden variar entre un invernadero y otro.

3. Colocar el resto de elementos

Si no tienes que añadir nada al interior del invernadero, ya estará listo para que comiences a cultivar tu huerto en su interior. No obstante, dependiendo del tipo de cultivo que vayas a plantar, es posible que necesites instalar ciertos elementos en su interior.

Por ejemplo, quizás quieras que tus cultivos sean regados a través de un sistema de riego por goteo, o hayas considerado instalar un compostador en el interior del invernadero. Del mismo modo, si vas a utilizar el invernadero para germinar semillas, deberás colocar el equipamiento necesario para ello.

Asimismo, antes de plantar cualquier cultivo de jardín o huerto, asegúrate de que las condiciones en el interior del invernadero seas las esperadas para esos cultivos. Comprueba la temperatura, si la ventilación es correcta, que los tornillos están bien asegurados, etc. Una completa revisión final nos ahorrará problemas y contratiempos inesperados.

Mantenimiento del invernadero de jardín

Cuanto mejor mantengas tu invernadero, mejor crecerán tus cultivos y mejores resultados obtendrás. Además, un correcto mantenimiento evitará que el invernadero sufra graves daños irreparables y, por lo tanto, acabarás ahorrando tanto tiempo como dinero a largo plazo.

Material de reparación

Para actuar rápido en el caso en el que tu invernadero sufra alguna rotura, es recomendable tener a mano cierto material de reparación. De esta forma, los imprevistos no llegarán a afectar el cultivo de tus plantas. En este «kit de reparación» no puede faltar un celo adhesivo para tapar los posibles agujeros que puedan hacerse en la lona de plástico o el vidrio de las ventanas y el techo.

También puedes guardar varios clips de acero galvanizado para unir la lona a la estructura si esta se separa en algún punto del invernadero, por ejemplo, a causa de un viento fuerte. Y, para proteger los tubos de acero, hazte con tapones de plástico del diámetro adecuado, pues son piezas que pueden caerse del invernadero y perderse fácilmente.

Revisión del invernadero

Al menos varias veces al año, revisa detalladamente todas las partes del invernadero para asegurarte de que está en perfectas condiciones. Es posible que, por ejemplo, en el techo de la cubierta haya un pequeño agujero del que no te hayas percatado y que puede poner en peligro los cultivos de tu huerto.

En relación con esto, puede que, si empleas el invernadero durante todo el año, tengas que adaptarlo a los cultivos y el clima de cada estación, ya que tu huerto no tendrá las mismas condiciones y necesidades en invierno que en verano.

Mejora del invernadero

Quizás con el paso del tiempo vas empleando cada vez más el invernadero y quieres cultivar más tipos de plantas, por lo que puede que el tamaño inicial del invernadero que elegiste no sea suficiente.

Si te ocurre esto, quizás no sea necesario construir un nuevo invernadero desde cero. Puedes aprovechar la estructura existente para ampliar la superficie de cultivo. Esto te será posible sobre todo si has optado por un kit de invernadero en el que se indique que se trata de un modelo ampliable o modificable.

Esperamos que esta información te haya ayudado a saber cómo construir tu invernadero de jardín o de huerto, ya sea en el campo o en tu propio hogar. Como podrás comprobar, hay una gran variedad de invernaderos, por lo que seguro que podrás encontrar el que más se adapte a tus necesidades. Te deseamos mucha suerte con su construcción y esperamos que disfrutes con el cultivo de tu huerto.